Victòria Coll, directora ejecutiva del Área de Envejecimiento y Bienestar (eib) del Consorci de Salut i Social de Catalunya (CSC), participó el pasado 16 de diciembre en el Grupo de Trabajo de Análisis del impacto de la Covid-19 en las residencias, del Parlament de Cataluña. Coll hizo un repaso de cómo la Covid-19 impactó en los centros asistenciales y cómo el CSC, entre otras organizaciones, aportó estrategias para poder dar respuesta a unos retos nuevos a los que el sistema asistencial y de salud no se había enfrentado nunca.
Tal y como explicó Victoria Coll en su intervención, "el momento del inicio de la pandemia fue como una película de terror. No teníamos herramientas." En este contexto, tal y como expuso Coll, el CSC hizo un análisis de la situación para poder detectar todo aquello que no funcionaba. "Al inicio de la pandemia la información era contradictoria, dispersa y poco concreta, con protocolos cambiantes constantemente y complejos de interpretar. Las políticas de aislamiento de salud pública no se consensuaron con las necesidades asistenciales y eso tuvo consecuencias para las personas que viven en residencias", indicó Coll que también puso de relieve la labor que hizo el CSC aportando profesionales sin experiencia, gracias a una acreditación profesional, en un momento en el que el absentismo laboral en las residencias llegó a ser muy acusado. "Incorporamos a más de 800 personas al mundo laboral y a las residencias, lo que supuso un pulmón para los centros que estaban absolutamente solos, sobre todo en las zonas rurales de Cataluña", apuntó la directora de eib. Entre otras acciones que promocionaron desde el CSC para amortiguar el golpe de la pandemia en las residencias, Coll también destacó la elaboración de la Guía rápida de atención a la Covid y la colaboración constante con los ámbitos social y de salud. Una cooperación que resultó muy provechosa, pero que, desgraciadamente, no ha continuado, lo que ha hecho que "las residencias hayan vuelto al punto de partida", lamentó Coll.
En su intervención, Victoria Coll recordó que es imprescindible incrementar las ratios de personal, "son insuficientes". También reclamó más apoyo sanitario, "tenemos que luchar para que esta integración de salud y sanitaria no se nos escape. Esta asistencia tiene que volver a las residencias porque es un derecho de las personas que viven allí". Por otro lado, Coll también reivindicó el papel de las familias a la hora de diseñar los modelos de atención y también el trabajo de todos los profesionales que trabajan en las residencias, para que mejoren sus condiciones de trabajo. Para la directora ejecutiva de eib hay que conocer la situación real de los centros asistenciales para poder dar respuesta de manera cuidadosa a las necesidades que puedan tener y también acabar con las que no hacen una gestión correcta de los servicios. "Se debe incrementar el nivel de transparencia en calidad del servicio. Tenemos que saber qué pasa en cada lugar, pero de verdad", apuntó.
Finalmente, Victoria Coll también reconoció los valores que han quedado tras el impacto de la pandemia, una situación que dejó patente que el "compromiso de los profesionales, de las instituciones y de la sociedad civil ha sido inmenso". Sin embargo, Coll advirtió, al final de su parlamento, que "este aprendizaje nos debe servir para construir la manera de gestionar y de relacionarnos con los ámbitos, el de salud y el social. No lo podemos perder".
Podéis ver el vídeo completo la intervención aquí.